A lo largo de la estrecha Península de Hicacos y en el punto más septentrional de la isla de Cuba, se extiende con 22 km de playa el famoso balneario de Varadero, ubicado en la provincia de Matanzas. A este peculiar destino, se puede acceder por carretera y cuenta con el aeropuerto internacional Juan Gualberto Gómez, ubicado en la vía que une a la ciudad de Matanzas con Varadero.
Según estudios arqueológicos el territorio estuvo poblado por los indios Tainos. Durante los años de la colonia no hubo un asentamiento importante, solo existía una pequeña comunidad de pescadores, hasta que un grupo de familias del vecino poblado de Cárdenas, se pusieron de acuerdo para construir sus casas de verano alrededor del año 1870. No fue hasta 1915 que el primer hotel de Varadero fue construido, pero alcanzó mayor desarrollo durante la década del ´40. Actualmente el balneario ha alcanzado un crecimiento sin precedentes, acompañado por la diversificación y calificación de su producto turístico.
En este punto paradisíaco de la geografía cubana se ha sabido combinar los atractivos de la naturaleza con el confort de la vida moderna. En ella se levanta una de las mayores infraestructuras hoteleras y extrahoteleras de la Isla: hoteles de máximo nivel en primera línea de playa, cabarets, restaurantes, se despliega diversas actividades náuticas, campos de golf, tiendas, todo un conjunto de opciones que satisface el gusto más exigente de sus visitantes. Se destacan fundamentalmente, en la excelencia de los servicios el Hotel Meliá Las Américas, Paradisus Varadero, Sandals Royal Hicacos, Mansión Xanadú, entre muchos otros.
Varadero es el destino turístico por excelencia para los que prefieren especialmente la modalidad de sol y playa. A su más preciado recurso, la playa, se le añade sus múltiples atractivos naturales como las cuevas y escarpes, un rosario de cayos vírgenes y de fácil acceso, las riquezas de un paisaje natural característico que se conserva en la porción más oriental del territorio, y otros de carácter cultural, histórico y ambiental estrechamente relacionados con las ciudades de Matanzas y Cárdenas, la Península de Zapata y el balneario de San Miguel de los Baños.
Usted puede realizar una gran variedad de paseos y excursiones: La Casa del Tabaquero, el Parque Retiro Josone; los cayos de la cercanía, particularmente en Cayo Blanco, el Parque de Diversiones; el Parque Ecológico de Varadero al este de la península, que esta constituido por 450 hectáreas de bosques y cavernas que contienen importantes pinturas aborígenes. De camino a Varadero se puede hacer un alto en la Cueva Grande de Santa Catalina, cerca de Carbonera y en la Cueva del Muerto, junto al puente levadizo de Varadero. Ambas cuevas están llenas de misterios y vestigios del pasado. De igual interés y atractivo resulta poder hacer una excursión por las Cuevas de Bellamar y de Saturno.
Existe una variada oferta para la actividad nocturna en discotecas como ¨El Palacio de la Rumba¨, ¨El Mambo Club¨. Se ofrecen actividades nocturnas con un típico sabor caribeño, como el del ¨Cabaret Continental¨ en el Hotel Internacional, en el Habana Café y en ¨Las Cuevas del Pirata¨. Asimismo, es majestuoso el Tropicana de Matanzas, situado en las afueras de Varadero.
Varadero es muy propio para el turismo de familia, parejas, luna de miel y para la realización de eventos e incentivos. Las facilidades para los congresos se complementan con el Centro de Convenciones Plaza América. Por otro lado, los fondos marinos de Varadero poseen más de 40 tipos de corales, diversidad de peces, langostas, camarones, cangrejos, tortugas y más de 70 tipos de moluscos. Marinas como Chapelin, Dársena de Varadero y Puerto Sol, garantizan las condiciones y medios para la práctica del inmersionismo, con embarcaciones apropiadas, personal preparado, centros de enseñanza de buceo, cámaras hiperbáricas y el transporte necesario para cualquier emergencia. El balneario de Varadero es un destino inolvidable e irrepetible.