Isla de la Juventud

La “tierra de los mil nombres”, apelativo conocido por muchos que identifica a la Isla de la Juventud, en alusión a un sin fin de denominaciones recibidas durante siglos. San Juan Evangelista, fue el nombre dado por Cristóbal Colón cuando descubrió este territorio en su segundo viaje por la región. Isla de las Cotorras y del Tesoro figuran también entre sus primeros nombres, en una época donde la ínsula sirvió de refugio a piratas y corsarios. Para los aborígenes, era simplemente Siguanea, mientras la denominación de Isla de Pinos fue la más duradera, su origen se remonta a los bosques de pinos que cubrían la región.

Situada al sur de la provincia de La Habana posee una extensión de 2 200 kilómetros cuadrados, la Isla de la Juventud ocupa la mayor área del archipiélago de Los Canarreos al sur de Cuba enfrentando retadora los embates del mar Caribe que la bañan por la costa meridional. El territorio es parte de los 672 cayos e islotes que conforman dicho archipiélago, con una accidentada costa, vegetación exuberante y un relieve donde están presentes los mogotes. A la isla se llega a través de vuelos directos desde el exterior, vía su aeropuerto internacional, a donde llegan también vuelos nacionales y charters de turismo, desde diversas localidades y también utilizando ferries, desde el puerto de Surgidero de Batabanó en la costa sur de La Habana.

La pequeña ciudad de Nueva Gerona es hoy su capital municipal, fue fundada en 1830 en recordación de Girona, España. La ciudad ha sobrevivido a los embates del tiempo, los arquitrabes, las arcadas, las fachadas sobrias, los anchos portales y las grandes columnas, son el testigo más veráz de aquellos años de dominación colonial española. Huella inapelable de la época es el parque, el ayuntamiento (hoy museo municipal) y su iglesia, grandes monumentos de un estilo arquitectónico que se impuso en cada nacimiento de la villa cubana. Es de interés visitar la Finca Museo El Abra, lugar donde residió temporalmente el Héroe Nacional José Martí y el Presidio Modelo, donde guardaron prisión Fidel Castro y sus compañeros, asaltantes al Cuartel Moncada de Santiago de Cuba en 1953.

La Isla de la Juventud se encuentra rodeada de cerros marmóreos, posee además una rica naturaleza, un conjunto de ecosistemas con un alto valor genético que incide en la flora, la fauna y el paisaje. Aparecen majestuosas las Sierras de Caballo con 293 metros de altura y Las Casas con 262 metros, con una estructura mogotoidal que custodian la capital pinera. Asimismo, es de interés la Jungla de Jones (finca forestal de alto nivel ecológico) y el Criadero de Cocodrilo en la Ciénaga Lanier, reservorio del rombifer: cocodrilo cubano, sólo compartido con la Ciénaga de Zapata en la provincia de Matanzas. De gran interés resultan las Reservas de fauna de Cayos San Felipe, la ecológica de Los Indios y las cuevas de Punta del Este, bautizada como la Capilla Sixtina del Arte Rupestre por poseer pictografías aborígenes.

En esta isla el visitante podrá disfrutar de excelentes áreas de playas, variadas ofertas náuticas y excursiones por tierra a puntos de interés de la geografía de la isla. Entre los lugares de mayor interés turístico, se encuentra Playa Bibijagua, famosa por sus arenas negras debido a la acción erosiva del mar sobre las rocas de mármol. Con una confortable y moderna infraestructura hotelera y otras facilidades insertadas en el entorno natural, se encuentra Cayo Largo del Sur en el extremo oriental del archipiélago de Los Canarreos con fabulosos paisajes y hermosas playas.

La Bahía de Siguanea es un importante lugar para el buceo, y en ella se lleva a cabo un concurso anual de fotos submarinas. Para los amantes de las actividades subacuáticas están listos 56 sitios de inmersión, varios de ellos con importantes colonias de corales, además de la existencia de cuevas, pasadizos y túneles. Los expertos destacan en especial puntos de inmersión con los nombres de Pared de Coral Negro, Túnel del Amor, Cueva Azul, El Pasaje Escondido, Cueva de los Sábalos, Piedra de Coral, EL Salto, Ancla del Pirata, Paraíso de las Levisas y Pequeño Reino.

En esta región se ubica la zona de buceo vinculada al Hotel El Colony, con un tramo de costa de seis kilómetros de extensión -localizado entre Punta Pedestales y Punta Francés- que muestra un entorno marino único. El Colony, se destaca como la mejor instalación turística de la isla. Su arquitectura data de la década del 50 y se encuentra rodeado de una exuberante vegetación. Cuenta con una marina, que le ofrece la posibilidad de realizar deportes náuticos, la pesca y uno de los más famosos Centros de Buceo Internacional del país.

Las leyendas de piratas, la historia y las atracciones naturales, hacen de esta pequeña isla un destino muy variado que despierta gran interés en los visitantes extranjeros.