Bayamo

Rodeada por las montañas que forman la Sierra Maestra al oriente de Cuba, se encuentra la provincia de Granma, la cual conserva un rico patrimonio natural, histórico y cultural. La ciudad capital de la provincia es Bayamo, ¨Ciudad Monumento Nacional¨ por su protagonismo histórico en los destinos del país.

Bayamo fue la segunda de las siete Villas establecidas en Cuba por el Adelantado Diego Velásquez y fue fundada en el año 1513. Fue en esta ciudad donde ocurrieron dos hechos trascendentales para la historia cubana; el primero, después del inicio de la Guerra de los Diez Años, el 10 de octubre de 1868, y que Bayamo fuese proclamada capital de la República en Armas, exactamente el 20 de octubre de 1868, se entonó por primera vez del Himno Nacional de Cuba. El segundo hecho fue el incendio de la ciudad por sus pobladores ante la inminencia de que cayera en manos de los españoles, el 12 de enero de 1869. Estos y otros importantes hechos de la historia de la isla ocurridos aquí la convirtieron en la “Cuna de la Nacionalidad Cubana”

La urbanización colonial de la ciudad marcada por su centro histórico, está conformada por estrechas calles, grandes casonas señoriales, plazas, parques y una antiquísima catedral. Es de gran interés la Casa Natal de Carlos Manuel de Céspedes -Padre de la Patria-; la Iglesia Parroquial San Salvador de Bayamo, que conserva celosamente el único fresco con motivo patriótico en una iglesia de la Isla y mantiene abierta la Capilla de Dolores (1740), cuyo retablo barroco figura entre los más hermosos del país. Así mismo están también la Plaza del Himno, la Plaza de la Revolución, la Ventana de Luz Vázquez, la Casa de la Nacionalidad Cubana y el recién restaurado paseo del boulevard en el centro histórico. Una de las tradiciones más arraigadas de Bayamo son los coches, carros tirados por caballos, en los que se puede recorrer sus estrechas calles y contemplar algunas de sus edificaciones y plazas más importantes.

El Parque Nacional Desembarco del Granma cuenta con ocho senderos y rutas espeleoarqueológicas, naturales e históricas, entre ellas la que cubre los 22 kilómetros que median entre el manglar de Las Coloradas y el cañaveral de Alegría del Pío, indicando la ruta de los expedicionarios del yate Granma que, liderados por Fidel Castro, desembarcaron por esa zona el 2 de diciembre de 1956.

Entre el mar y la Sierra, y con un espectacular escenario, aparece Marea del Portillo, un destino de singulares atractivos con un paisaje de variados atributos, donde se encuentran localizados 17 sitios para el buceo, los más atractivos se ubican precisamente en la zona de Cabo Cruz, aunque para disfrutar a plenitud su estancia puede transitar por los senderos que conducen a los saltos de agua de los ríos Cilantro y Las Yaguas; también puede prever una excursión a Cayo Blanco, un diminuto islote situado a sólo 500 metros de la playa. Para quienes prefieren el recogimiento y la privacidad de estos parajes remotos, aquí podrá disfrutar de un grato alojamiento con una infraestructura de servicios de esmerado confort. En las inmediaciones del poblado de Guisa, puede llegar al Jardín Botánico de Cupaynicú; en la Carretera Jiguaní-San Germán está el monumento Dos Ríos, lugar donde cayera el Héroe Nacional José Martí en 1895. Las ruinas del ingenio La Demajagua imponen un alto en el camino a Manzanillo, segunda ciudad en importancia de la provincia. Ciudad costera bañada por las aguas del Golfo de Guacanayabo, rodeada de historias de piratas y cuya glorieta morisca constituye sin dudas su rasgo más distintivo. La ciudad de Bayamo y Manzanillo cuentan ambas con aeropuertos para vuelos nacionales e internacionales.

Bayamo es una excelente opción para quines prefieren algo diferente, naturaleza, historia y tradición.